Hoy en día, esta disciplina es uno de los principales aliados del trabajo de los chefs, cocineros, foodies, críticos y marcas de alimentos, ya que permite que sus propuestas llenas de sabores y texturas logren trascender a un plano visual y multisensorial, donde las experiencias se entrelazan con un público más amplio. De esta forma, se cumple un gran deseo actual: formar parte del movimiento gastronómico global; por ello, te daré cinco consejos para que lo hagas de la forma más increíble posible
Texto y fotos por Gonzalo Picón
Ahora, la expresión popular “comer con la vista” se transforma en una estrategia de difusión dentro de una nueva era comunicacional, que ha permitido la evolución del sector de la gastronomía hasta llevarlo a un punto muy fuerte y desarrollado.
Desde mi trabajo como fotógrafo gastronómico, busco traducir la complejidad de sensaciones que despierta una comida a través de imágenes con alto sentido estético y artístico, buscando resaltar un plato desde sus ingredientes, a fin de representar el trabajo casi invisible de productores, sin dejar de lado las técnicas de cocina y la presentación del chef.
Distintas aristas que, en su conjunto, conforman una atractiva propuesta gastronómica que se representa en la imagen de un plato o receta, la cual será directamente plasmada en la página de un libro, revista impresa, una app o publicación digital.
Desde el punto de vista artístico y fotográfico, hay elementos como la composición, armonía visual y sentido estético que se relacionan inaudiblemente con aspectos técnicos como el trabajo de la luz y el enfoque, principales aliados al momento de captar un plato y resaltar sus principales atributos visuales: color, textura, volúmenes y temperatura, para así transmitir de forma fiel sus sensaciones, cualidad que se ha vuelto parte esencial de mi estilo y propuesta visual, la cual construyo tomando en cuenta estas mociones:
Inspiración
Sin lugar a dudas, mi principal inspiración nace al probar la creación que el chef me presenta para fotografiar. ¡Es lo ideal! También conocer su historia y la de sus ingredientes, tratando de descubrir el rol que juegan en la concepción del plato para así transmitir su esencia.
Creatividad
El principal elemento alimentador de ideas disruptivas en la fotografía gastronómica es mantenerse actualizado en imágenes. Para ello, es fundamental observar el trabajo de chefs y fotógrafos alrededor del mundo como referencias, ejercicio que se hace muy sencillo gracias a la gran exposición que tiene la gastronomía en redes sociales.
El emplatado
Actualmente, para mí, el secreto de un excelente emplatado (habilidad que muchas veces forma parte del protagonismo del producto que vamos a retratar) está en la estética creada por el chef y su equipo creativo. Me encanta destacar las técnicas de cocina que se emplean para lograrlo.
Elemento visual imperdible
Un elemento común que forma parte de mi propuesta fotográfica es la luz sobre el plato o producto gastronómico a destacar, a fin de colocar el foco en el elemento que considero se debe resaltar. Para ello, me encanta usar un fondo oscuro, casi negro, para que prevalezca de manera impactante el objeto iluminado.
Sesión fotográfica AUNO
Siempre estoy en la constante búsqueda de trabajar con chefs a quienes admiro por su gran trabajo estético. Podría decir con humildad que, en Panamá, he logrado este objetivo al laborar con referencias muy importantes en la gastronomía panameña por lo que, en estos momentos, estoy en proceso de llevar mi trabajo fuera del país y así buscar ampliar mis oportunidades fotográficas en otros lugares como Colombia, Perú y Estados Unidos.
¡Recuerden que el objetivo es impulsar la gastronomía en este contexto global, por lo que las latitudes se vuelven efímeras!
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